Llamo escuela ala que verdadera mente es un taller de hombres; es decir aquella en la que se bañan las inteligencias de los discípulos con los resplandores de la sabiduría para poder discurrir pronta mente por todo lo manifiesto y oculto.

En cambio s ve todo lo contrario, puesto que la vida no se han creado escuelas en las localidades pequeñas, aldeas o lugares. donde existen escuelas no son justamente para todos sino para algunos pocos, los mas ricos; porque siendo caras los pobres no son admitidos a no ser en algún caso por la compasión de alguno.

En resumen. puesto que toda la vida depende de la primera edad y de su educción, se habrá perdido si todos los espíritus no fueran aquí preparados para todas las cosa de la vida. como en el útero materno se forman a cada hombre desde manos asta pies así en las escuelas deberá enseñase todo cuanto haga referencia al hombre completo.